PREVENIR LAS TENDINITIS
Las tendones unen nuestros músculos a los huesos y están sometidos a muchas cargas.
Las causas más comunes de ocasionar una tendinitis son los movimientos repetitivos,
las sobrecargas musculares y las malas técnicas a la hora de ejecutar una actividad.
Esto es aplicable tanto en el deporte como en el trabajo y la vida diaria.
También influyen otros factores como la edad, la condición física, la alimentación y el sobrepeso.
Teniendo en cuenta todo esto, la mejor manera de prevenir las tendinitis es teniendo unos buenos hábitos, es decir, calentar bien antes del ejercicio, dosificar el tiempo y la intensidad del mismo, usar una buena técnica al realizarlos y estirar siempre al finalizar la actividad.
En caso de tener ciertas molestias en zonas tendinosas, la aplicación de hielo durante 15-20 minutos puede aliviarnos al bajar la inflamación.
Si continuasen los síntomas, lo suyo es acudir al fisioterapeuta ya que disponemos de técnicas muy efectivas para la curación de las tendinitis.